Si te enfrentas a un embarazo no planificado, es probable que estés preocupada y estresada por tu futuro. Lo que habías planeado era la universidad, no un bebé. Te has fijado el objetivo de graduarte con tu título y no estás seguro de poder hacerlo si decides ser padre. Otros temores pueden ser la idea de ser juzgada por los compañeros o los profesores, o el miedo a no ser capaz de compaginar el embarazo y la maternidad con la carga de trabajo de la universidad…
Deja que los voluntarios de Birthright sean los primeros en decirte que puedes hacerlo. Estamos aquí para calmar tus miedos y mostrarte los recursos que te ayudarán a salir adelante.
¿Sabías que las estudiantes embarazadas y con hijos están protegidas por el Título IX de las Enmiendas Educativas? Según el National Women’s Law Center, el Título IX prohíbe la discriminación por razón de sexo -incluido el embarazo y la crianza- en todos los programas educativos que reciben financiación federal. Los profesores o los administradores de la escuela no pueden decirte que tienes que abandonar los estudios por estar embarazada. De hecho, los profesores están obligados a hacer ciertas excepciones con las estudiantes embarazadas, incluyendo la excusa de las ausencias por embarazo o parto. Cuando la estudiante se reincorpora, debe ser reintegrada al estatus que tenía antes de tomar la licencia.
La mayoría de las universidades cuentan con políticas y procedimientos para acomodar a las estudiantes embarazadas. La Oficina de Diversidad, Equidad e Inclusión de la Universidad de West Chester, por ejemplo, anima a los profesores a mantener una conversación con la estudiante embarazada para planificar una forma satisfactoria de que ésta complete el semestre. Esto puede incluir cómo el estudiante recuperará las tareas o clases perdidas. Otras posibles adaptaciones, según la página web de la Universidad, son la ampliación del tiempo de las tareas, un pequeño descanso durante la clase o la oportunidad de comer o beber en clase, entre otras. El estudiante también puede adquirir un permiso de estacionamiento temporal para discapacitados a través de la Oficina de Servicios para Estudiantes con Discapacidad. Estas adaptaciones también pueden aplicarse a las estudiantes que tengan problemas médicos por haber dado a luz recientemente, así como a las estudiantes que estén amamantando o extrayendo leche.
Para las estudiantes que amamantan o se sacan leche, West Chester y otras universidades semilocales, como Kutztown y Temple, ofrecen varios espacios de lactancia privados en sus campus.
Recuerda que no eres la primera que se queda embarazada mientras intenta terminar sus estudios. Muchas mujeres han estado en tu lugar en algún momento y han demostrado que es posible. Estas mujeres tienen agallas y perseverancia como tú. E incluso hay subvenciones y becas universitarias a las que puedes optar para hacer que tu objetivo sea alcanzable si te preocupan las finanzas.
Si estás embarazada y quieres a alguien con quien hablar sobre tus aspiraciones universitarias y que te ayude a conseguir un plan de juego, llámanos al 610-436-0773 o visita nuestra página web para concertar una cita online.